Las centrales Kainji, Jebba y Shiroro son las tres más grandes de Nigeria con una potencia instalada de 1.900 MW. Este complejo pertenece al estado, quien luego de verificar problemas en la generación en cada una de las centrales, decidió llevar a cabo un proceso de privatización de las centrales.
En el marco del proceso de privatización de las tres centrales, LVA desarrolló el estudio de evaluación técnico-económico para el proceso de Due Dilligence de las centrales.